¡Corto!
Esta página trata sobre un Corto Animado de Club Penguin. |
Les Deseamos Una HerMORSA Navidad | |
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Information | |
Género | Animación |
Longitud | 22 Minutos |
Nº de temporadas | 1 |
Nº de episodios | ? |
Personajes | Rockhopper
Roofhowse Hermosa Morsa Herbert P. Bear |
Serie | Club Penguin Cortos Animados |
Años | 17 de diciembre 2014 (Reino Unido)
20 de diciembre 2014 (Portugal) 24 de diciembre 2014 (Estados Unidos, Canadá y Alemania) |
Les deseamos una herMORSA Navidad (We Wish You a Merry Walrus en inglés) es un corto animado, se estrenó en el canal Disney Channel de Reino Unido el 17 de diciembre del 2014.
Descripción[]
La historia sigue a un pingüino marinero llamado Roofhowse que llega a la isla de Club Penguin sólo para encontrarse a sí mismo envuelto en una aventura inesperada. A raíz de un mágico Puffle Cristal celeste, Roofhowse y sus amigos van a la legendaria isla de la Hermosa Morsa y aprender que deben unirse para detener que su celebración favorita sea silenciada para siempre.
Trivia[]
- Es el segundo corto en tener un estilo de animación stop-motion. El primero fue Copa Club Penguin (stop-motion).
- El programa está dirigido por Tobias Fouracre, el productor creativo es Matt Danner, y los escritores son Martin Olson y Christopher Painter.
- Fue lanzado en francés, alemán, español, portugués y holandés, así como inglés.
- Herbert aparece en esta especial y se disfraza como Hermosa Morsa
- Después de estar al aire en todos los países, se puede comprar en iTunes por 1,99 dólares, y en HD por $ 2.99
- Le deseamos una HerMorsa Navidad se estreno en Disney Channel en el Reino Unido el 17 de diciembre de 2014.
- Le deseamos una HerMorsa Navidad se estreno en Disney Channel en los Estados Unidos, Canadá y Alemania el 24 de diciembre de 2014.
Historia[]
El Capitán Rockhopper recibe al espectador en su barco, el Migrator, y lo introduce a la historia principal.
La isla y sus pingüinos se preparan para la celebración de la HerMORSA Navidad, un festejo anual dónde una misteriosa morsa llega a la isla en su trineo carreado por mágicos puffles de cristal voladores para dar regalos a todos, sin juzgar.
Se asoma un telescopio en el océano. Es el submarino de Herbert, el oso polar quién le habla a su aliado, Klutzy. Herbert se queja de las celebraciones de los pingüinos y le comenta a su compañero que es hora de iniciar su malévolo plan: la Operación Noche Silenciosa.
Un desafortunado pingüino llega a la isla. Se trata de Roofhowse, un marinero en busca de nuevos lugares dónde vivir. Roofhowse llega a su nuevo iglú, el cual se termina desarmando.
Roofhowse conoce a los pingüinos Blizzard y Sydmull. Ellos buscan amigarse con el marinero, lanzándole una pelota de fútbol americano y enseñándole como hacer una buena iluminación de iglú para la HerMORSA Navidad. Roofhowse intenta mostrar sus luces, pero termina quemando su iglú.
Jangrah, la presidenta del Comité de Iglús, le da la bienvenida a Roofhowse con una canasta de frutas. El marinero también conoce a otra chica: Lorna, quien entiende a Roofhowse en el hecho de que es difícil hacer amigos al mudarse de un lugar a otro. Jangrah explica que en Club Penguin eso es distinto, y que en la isla todos son amigos.
Jangrah se encarga de preparar la obra teatral “Una HerMORSA Navidad” y le ofrece a Roofhowse participar en la obra. Sin embargo, el marinero rechaza la propuesta ya que no sabe por cuánto tiempo se quedará en la isla.
El reloj de Jangrah suena y le avisa qué es hora de alistarse. Jangrah despide a Roofhowse, y el grupo va al escenario. Lorna regresa para hablar con Roofhowse, contándole sobre una antigua profecía sobre un extraño que salvaría la HerMORSA Navidad.
Llega la hora de la actuación. Lorna narra la obra, Blizzard actúa de la Hermosa Morsa, Sydmull se ocupa de los efectos especiales, y Jangrah asiste a sus compañeros. Blizzard se olvida de sus líneas, e improvisa de una manera que hace al público reír. Jangrah aprovecha esta oportunidad y le pide a Lorna que busque donaciones para la organización Coins For Change.
Por otra parte, Roofhowse se siente desilusionado al ver que no tuvo suerte en Club Penguin. Tras sentirse fuera de lugar planea irse de la isla, pero llega algo inesperado que lo detiene: un puffle de cristal que parece buscar ayuda.
El puffle de cristal hace tropezar a Roofhowse y ambos terminan rodando en una bola de nieve. La bola termina cayendo en el escenario donde Blizzard, Sydmull, Lorna y Jangrah están trabajando. Roofhowse les cuenta a sus amigos sobre el puffle de cristal, y quedan asombrados. Lorna interpreta que la Hermosa Morsa necesita ayuda y el grupo decide embarcarse en la misión.
Los pingüinos llegan a la playa. El puffle de cristal vuela por el océano y el grupo se pregunta como harán para seguirlo. Roofhowse comenta que es bueno en navegar y toma su pequeño bote dejando al resto atrás. El grupo se molesta al ser dejados por Roofhowse. Jangrah comenta que necesitarían algo más grande, como un barco. Afortunadamente, el Capitán Rockhopper y Yarr llegan en el Migrator para ofrecerles subir.
Jangrah y el capitán le sugieren a Roofhowse subir al barco. Rockhopper observa a Roofhowse en su pequeño bote y le dice que es bienvenido en el Migrator. La misión es clara: ir a la isla de la Hermosa Morsa para averiguar qué sucede.
Al estar todos a bordo, Rockhopper aclara que viajar tiene precio y le dice al grupo que pueden viajar a cambio de la cubeta de donaciones para Coins For Change.
El grupo se acerca a la isla, pero un telón mágico de cristal que protege la isla de la Hermosa Morsa los detiene. El puffle de cristal toma fuerzas y abre el telón para que el Migrator pueda pasar al otro lado.
Los pingüinos se impresionan al ver el gran castillo de la Hermosa Morsa. Llegan a tierra firme y oyen una voz siniestra. Quién se asoma parece ser la Hermosa Morsa, pero no es así. Se trata de Herbert, quién está disfrazado como la famosa morsa.
El oso captura al grupo en una red y les cuenta su plan malévolo. Este consiste de capturar y usar los puffles de cristal, secuestrar a la Hermosa Morsa, hacerse pasar por ella y entregar regalos malvados a la isla de Club Penguin. Estos regalos armarían la llamada “cúpula del silencio” en la isla, así Herbert ya no tendría que oír a los pingüinos.
Herbert se da cuenta de que no está recibiendo tanta atención como deseaba, y lo deja pasar. El oso envuelve a los pingüinos en papel de regalo y los envía a una máquina empaquetadora. Luego el villano se va en el trineo de la Hermosa Morsa. La máquina empaqueta a casi todo el grupo, a excepción de Roofhowse y Rockhopper, quienes tratan de detener el artefacto. Ellos fallan, pero el puffle de cristal los ayuda con su magia.
Los pingüinos salen de sus envoltorios y descubren que hay otro envuelto más, quién resulta ser la Hermosa Morsa. Lorna trata de explicarle a la morsa lo sucedido, pero él la interrumpe diciéndole que todo el tiempo estuvo ahí y que no necesita explicaciones.
El grupo se apena ya que Herbert se llevó el trineo, y no llegarían a tiempo a Club Penguin ni con el Migrator. Pero la Hermosa Morsa los calma, contándoles que tiene otro trineo. Todos van a la isla.
Herbert, mientras tanto, llega a la isla que espera a la Hermosa Morsa. Luego, el oso lanza los obsequios para que la cúpula pueda armarse. El villano intenta lanzar el último regalo, pero Roofhowse y su pandilla llegan justo a tiempo para detenerlo. A Herbert se le cae el gorro del traje y la DJ Cadence lo ve, avisándole a todos que esa no es la Hermosa Morsa y que deben salir de la pista.
Herbert encuentra a la Hermosa Morsa y esta le dice que el oso fue muy malo. Sin embargo, la Morsa le da un obsequio de todos modos y lo empuja hasta caer. Roofhowse pierde el equilibrio y se le cae el obsequio malvado de Herbert. La cúpula se arma con Herbert y Klutzy dentro. Empiezan a caer regalos del cielo, y los pingüinos bailan al ritmo del Baile del Puffle molestando a Herbert. El oso polar abre su regalo y descubre que son unas orejeras que lo dejan en paz.
Roofhowse mira pensativo a sus amigos mientras bailan. Rockhopper le devuelve la cubeta de donaciones y le ofrece al pingüino ser parte de sus aventuras. Roofhowse rechaza la invitación porque al vivir esta gran aventura decide quedarse en Club Penguin junto con sus amigos.
Desde el Migrator, la Hermosa Morsa despide al espectador deseándole una HerMorsa Navidad y un buen vuelo. Rockhopper cierra la historia yéndose en su barco, ahora tirado por puffles de cristal.